viernes, noviembre 03, 2006


Un Segundo para dormir

Todos los días veo, cuando el tren esta a full de gente, subir en todas las estaciones viejas y viejos con bastónes, tuertos, doblados y minas embarazadas, que al ver que esta lleno el tren comienzan a “pispear” a los que están sentados a ver si alguno se desocupa, o los miran para ofrecerle el lugar. Pero esa es la cuestión, cuando alguien necesita el asiento por alguna razón (ya sea porque le falta una gamba, un brazo o hay una mina embarazada) comienza el baile de cabezas dormidas. Comenzas ver como se les quiebra el cuello a todo el mundo para un costado (como si bruce lee les hubiese hecho una toma mortal) y todos se hacen los giles, ya que se ponen a leer cualquier cosa o simplemente dan vuelta su cabeza y empiezan a mirar por la ventanilla, como si el viaje que realizan todos los días fuera interesante o estan esos que cogotean para ver si el cartel de la estacion es el correcto.
Tratemos de ser mas generosos en los viajes con la gente que no esta en condiciones de viajar como ganado.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo Pato aunque mas de una vez hay viejos pelotudos que te piden el asiento como si fuera obligacion...estas cuestiones andan bien cuando salen por motus propio...aunque como vos coincido que mas de una vez se mandan grandes bailes de cogote (con doblez de cote acorde a la obsecuencia imperante) y se hacen los pavos reales...En esos casos he visto la efectividad de un buen hondazo en el orto...

Abad Cokues

Túlio dijo...

una vez una señora gritó conmigo para que yo diera lugar para una viejita... y yo estaba un poco lejos de la abuela, pero bueno, proxima vez miro la paisaje.